Y todo comenz� un d�a de navidad. Me hab�a preparado especialmente para la ocasi�n. Chocolate caliente, la chimenea, dos mantas y una pel�cula. Ser�a una perfecta velada. Finn, Carol y Pap� hab�an decidi� ir a visitar a la t�a Mildred y, realmente no estaba muy deseoso de ir. Seguro m�s de uno pensara mal de m� pues, en teor�a, navidad es un d�a para compartir con la familia. Pero el hecho es que, cuando uno tiene fiebre alta y un condenado resfri�, no tiene muchas ganas de salir al fri� invernal y soportar a sus parientes estir�ndole las mejillas, emocion�ndose por lo mucho que uno ha crecido. No es que haya crecido demasiado, no al menos f�sicamente. Aunque es cierto que, este a�o muchos cambios importantes en mi vida han ocurrido. Muchas emociones juntas. Aun no comprendo como no explot�.

Volviendo al tema principal, unas horas antes, yo esperaba pasar la navidad solo en casa. Para mi fortuna, �l se ofreci� a hacerme compa��a. �Diablos que ese chico hizo de mi vida algo maravilloso! Si no fuera por �l, no hubiera podido soportarlo. Nunca antes hab�a conocido alguien tan semejante a m� y realmente gozar del privilegio de su compa��a era fant�stico. Era un grandioso amigo y un ejemplo a seguir y mi mayor confidente, claro, luego de Mercedes.

El timbre son� y con mucho esfuerzo me aproxim� a abrir la puerta. All� estaba �l, salud�ndome con una gentil y elegante sonrisa. Y all� estaba yo, con un aspecto de enfermo, totalmente deplorable.

-�Sabes? me recuerdas a Rudolph- Me dijo ri�ndose de mi resfriada y colorada nariz. Era incre�ble como su risa tambi�n era tan estilizada, tan elegante. Ese chico desped�a elegancia por todos lados.

-Pasa Blaine- lo invite adentro. Dej� su chaqueta negra sobre el sof� y tom� asiento en el sill�n. Me sent� a su lado y me tap� con una de las mantas. Realmente me sent�a p�simo.

-�Seguro que estas en condiciones de ver una pel�cula?- Me pregunt�. Jurar�a que son� preocupado.

-Estoy bien- le dije. Intent� pararme para colocar la pel�cula pero Blaine me sent�.

-Deja que me encargue de eso, se�or enfermo.

Me coloc� la segunda manta encima para asegurarse de que estuviera lo suficientemente abrigado. Me acerc� el chocolate y se encarg� �l mismo de colocar la pel�cula. Me sent�a un p�simo anfitri�n y Blaine se comportaba como un caballero. La pel�cula comenz� y Blaine se sent� al lado mi�.

Titanic: Una pel�cula que podr�a ver quinientas veces sin cansarme de llorar. Aunque quiz�s, en este caso, Blaine ten�a toda la raz�n pues, empezaba a ver borrosa la imagen de Leonardo Di Caprio. A la media hora de empezada la pel�cula, a la cual, no estaba prestando en absoluto atenci�n debido a mi malestar, mi cuerpo comenz� a temblar estrepitosamente. Fue bastante raro pues estaba incre�blemente abrigado y ten�a dos calidas mantas encima de mi cuerpo. Blaine pos� sus ojos en m� y me sonri�. Acto seguido se me aproxim� y me rode� con sus brazos para hacerme entrar en calor. Inmediatamente, mi cuerpo dejo de temblar. Pero, eso si, mi coraz�n, se agit� de una forma sobrenatural. No comprend�a por qu� estaba tan nervioso. Bueno, de hecho si. El contacto tan estrecho con el cuerpo de Blaine me avergonzaba completamente. Debo agradecer de haber estado tan enfermo pues si no, se hubiera dado cuenta de que mis mejillas estaban completamente coloradas. Lo m�s extra�o de todo era que, a la vez me sent�a inmensamente c�modo. Era una sensaci�n familiar y a la vez completamente nueva. No sabr�a describirla por mucho que lo intentara. A pesar de estar enfermo y de que mis sentidos me fallaran, pod�a sentir el calor del cuerpo de Blaine, y escuchar su respiraci�n. Una respiraci�n pausada, tranquila y realmente relajante.

Fue bastante el tiempo que permanecimos as� hasta que decidi� soltarme.

-�Mejor? – me pregunt�

- Si… gracias- dije intentando esquivar su mirada.

Me sent�a un completo tonto. No pod�a verlo a los ojos sin que mis mejillas se ti�eran por completo. Y no terminaba de comprender si era debido a la gripe o si realmente me estaba avergonzando.

Continuamos viendo la pel�cula, mejor dicho, �l continu� viendo la pel�cula. Mi mente no estaba funcionando en absoluto. Al parecer, por lo que pude distinguir entre los gritos y las figuras borrosa en movimiento, estaba comenzando a hundirse el barco. Mi cabeza me estaba matando, era realmente insoportable. Intent� disimular lo mejor que pude pues, no quer�a preocupar a Blaine y menos interrumpirle la pel�cula. Al parecer mis intentos fueron completamente vanos, pues par� la pel�cula y se qued� mir�ndome. Acerc� su mano a mi frente para medirme la temperatura.

-Dios santo Kurt, estas hirviendo- exclam�- �Por qu� no dijiste nada? Dime que tienes algo contra la gripe

-Si, esta en el botiqu�n del ba�o, ir� a bus…

-Oh no, t� no te mueves de aqu�. Ind�came donde esta y yo lo traer�.

-No quiero molestarte Blaine.

-No es ninguna molestia.- dijo sonriendo- recu�state y dime donde esta.

-En el primer caj�n a la derecha.- le dije ya sin oponerme.

Blaine me coloc� un coj�n para que me acostara en el sof� y me cubri� con todas las mantas. Acto seguido desapareci� por unos quince minutos. Realmente me sent�a muy mal por �l. Siendo v�spera de navidad, se dedicaba a cuidarme en vez de festejar con su familia. Eso desencaden� en m� una pregunta �Por que rayos hab�a decidido venir aqu� en vez de estar con sus parientes? Volvi� aparecer portando un baso con agua, un t�, un pa�o mojado y la medicina. Era realmente un servicio de lujo. M�s de lo que podr�a desear.

-Me tom� el permiso de pasar por tu cocina. Lo siento- dijo

-Eres incre�ble- le confes�- Quien deber�a sentirlo soy yo. Estoy �picamente arruinando tu navidad y para colmo, priv�ndote de "Titanic"

-De hecho, me la estoy pasando muy bien- dijo sonriendo. �Por qu� era tan incre�blemente encantador?

-No te comprendo. �Qu� te llevo a querer acompa�arme hoy? – le pregunt�.

-Las navidades en casa no son muy familiares.- me confes�- suelen ser gigantescas, con muchos invitados y cantidades exuberantes de comida. Realmente es lo mismo que pasarla solo. Quer�a alejarme un poco de ese entorno, es un poco molesto.

-Tus padres deben ser muy sociables.- fue lo m�s inteligente que pude acatar.

-Mi abuela.- me corrigi�- mis padres fallecieron hace unos a�os en un accidente.

-Lo lamento- me disculpe. Ahora si me sent�a como un completo idiota, y m�s cuando �l, sonre�a tan amablemente.

-Descuida.- me intent� calmar- Digamos que para mi abuela no es muy dif�cil socializar. Despu�s de todo, es la cabeza de una gran corporaci�n, adem�s, claro, de tener el titulo de duquesa.

Lo mir� at�nito. No me hab�a equivocado. En verdad era un pr�ncipe.

-Vaya- exclam� casi sin habla- me figuraba que eras un arist�crata, despu�s de todo, tienes todo el comportamiento de uno. Debe ser genial.

Blaine ri� a carcajadas.

-No del todo, si eres el heredero gay de la fortuna familiar.- su sonrisa ahora se ve�a amarga y sus ojos reflejaban cierta tristeza. Me sent� muy mal de haber tocado el tema.- No todos son como tu padre Kurt. Es lamentable, pero es cierto.

-Blaine…-intent� levantarme con mis escasas fuerzas y tom� su mano- Lo siento, encima de todo, ahora lo �nico que hago es entristecerte. No deb� tocar el tema.

-Ya te he dicho. Me la estoy pasando verdaderamente bien.- Me sonri� nuevamente. Esta vez sus ojos reflejaban calma, y, jurar�a, gratitud.- Adem�s, hace bien poder desahogarse un poco. M�s con alguien como tu Kurt.

Nos quedamos en silencio unos segundos mir�ndonos fijamente. No pod�a apartarme de sus ojos. Creo que esa fue la primera vez, que vi verdaderamente a Blaine. A pesar de ser un chico tan amable, tan comprensivo y tan servicial, en el fondo �l lidiaba con su propio destino. Nunca me hab�a pedido ayuda, nunca me hab�a hablado de esa forma de si mismo. Yo tampoco le di pie para hacerlo. Siempre con mis problemas con Karofky, con el colegio.

En ese momento me percat�, todav�a segu�a sosteniendo su mano. Inmediatamente lo solt�. …l dio una risita y me miro nuevamente. Coloc� sobre mi frente el pa�o mojado

- Anda, toma tu remedio y tu t� – me pidi�.

Comenzamos a hablar de temas triviales mientras esper�bamos las doce. La fiebre comenzaba a bajarme y de a poco, pude incorporarme. Gozaba plenamente de la compa��a de Blaine. Podr�a decir incluso, que fue una de mis mejores navidades.

Pasaba el tiempo y ya casi estaban por dar las doce. En eso, Blaine fue a la cocina a buscar dos copas de Champagne.

-4…3…2…1…- hicimos a un�sono la cuenta regresiva.

Finalmente, dieron las doce y el 25 de diciembre lleg�. Ambos chocamos nuestras copas y bebimos un poco. Para el momento ya me sent�a mucho mejor. En eso mi tel�fono son�. Era pap� llamando para saludarme y verificar que estuviera bien.

-Feliz navidad pap�- lo salud�

-�Todo bien por all�?- me pregunt�.

-Si, Blaine esta aqu� conmigo y me siento mucho mejor- le dije.

-Estaremos un par de horas m�s aqu�, cualquier cosa que necesites av�same �De acuerdo?

-Claro

-Adi�s hijo

-Te quiero.- acto seguido cort� el tel�fono.

Blaine se qued� mir�ndome sonriente.

-Bueno, es hora de que Santa Blaine entregu� sus regalos- dijo con una voz graciosa

-�Me trajiste un regalo?- Lo mir� sorprendido. Ahora si me sent�a p�simo. No hab�a comprado absolutamente nada para �l.

-No es nada del otro mundo. El otro d�a estaba recorriendo unas disquer�as y lo encontr� y… bueno aqu� esta- Blaine me entreg� un delgado paquete cuadrado con un list�n en �l. Al abrirlo, encontr� el CD de la banda sonora de "Rent".

-Esto es fant�stico- le respond� entusiasmado.- Muchas gracias. Tendr�s que perdonarme, no tuve oportunidad de comprarte nada.- dije muerto de verg�enza.

-No hay problema. Despu�s de todo, me diste una estupenda navidad.

Lo mire fijamente. No pod�a creer lo que me dec�a. Y lo peor, no hab�a ni una gota de sarcasmo en sus palabras.

-Sobretodo por el hecho de que te hice cuidarme y no te atend� correctamente- dije ir�nicamente- eres un verdadero caballero Blaine. Perdona por todo lo que te hecho pasar esta noche.

-�Bromeas? Debo admitirlo, realmente fue at�pica. Pero me la he pasado muy bien contigo. Creo que estar contigo fue la mejor decisi�n que pude haber tomado. – Dijo sonriendo gentilmente. Realmente no pude evitar sonrojarme al o�rlo decir esas palabras.

-Bueno pues… - no sab�a que decirle. Me hab�a dejado sin habla. Suerte para m� que su celular comenz� a sonar.

-�Diga?- comenz� a hablar.- Si. Si lo s�. Descuida. Nos vemos.- acto seguido cort� el tel�fono y suspiro. – Perd�name Kurt. En verdad no quiero pero debo marcharme. Mi abuela esta bastante enfadada por mi ausencia.

-Por favor, no te disculpes. No quiero robarte m�s de tu tiempo.- le dije. Deb�a admitirlo. Me entristec�a un poco que se marchara tan pronto.

-Lo digo enserio. La est�bamos pasando muy bien y me gustar�a quedarme. Pero es mejor no tensar las cosas con mi abuela.- Le cre�. Se ve�a un poco decepcionado. - �Estar�s bien sin mi?

-Por supuesto. Ya casi me ha bajado la fiebre- le dije.

Lo escolt� hasta la puerta. Cuando la abr� realmente me sobresalt�. El cielo estaba inundado de fuegos artificiales. Era un espect�culo realmente bello. Los dos nos quedamos parados en la entrada, mirando un rato al cielo. Al parecer �l no lo not�, pero me detuve un segundo para contemplar su rostro. Blaine miraba apasionado y con mucho anhelo aquel ef�mero baile de colores que se produc�a. No se por que, pero sent� mucha pena por �l. Era como si quisiera salir volando y alcanzar el cielo.

En ese momento, no pude evitar reparar en un detalle, que, posiblemente, cambiaria mi vida. No pude evitarlo, pero al verlo, me paralic� completamente y me aterr�. Blaine bajo la vista y me mir� un poco confundido. Sigui� con la vista la misma direcci�n que a mis ojos ten�an absorbidos. No pod�a no mirar aquel peque�o detalle en el techo de la entrada. Enseguida, el comprendi� de que se trataba.

-Mu�rdago- dijo secamente. Aquella palabra me produjo escalofr�os.

Nos miramos mutuamente. No sab�a que hacer. No sab�a como reaccionar y me estaba muriendo del miedo. Al parecer Blaine pudo leer todo eso es mi ojos. …l suspiro y me sonr�o con ternura intentando calmarme. Con delicadeza, me tom� del ment�n y me miro fijamente. Recuerdo a la perfecci�n sus ojos brillando. Acto seguido y, con suma delicadeza se acerc� a mi rostro y, en un abrir y cerrar de ojos, sus labios rozaron los m�os. Lo pude sentir, el contacto de sus h�medos labios con los m�os. El tiempo se detuvo completamente para m�. Mi coraz�n estaba a punto de escaparse de lo r�pido que lat�a. Sent� una explosi�n interior y una extra�a sensaci�n recorri� toda mi espina dorsal d�ndome escalofr�os y volteando mi mundo. Quiz�s lo m�s gracioso es que todas estas sensaciones se produjeron en no mas ni menos que en dos segundos. Solamente dos segundos de un beso de Blaine, bastaron para enloquecerme. S� separ� de m� con la misma delicadeza con la que me hab�a besado. Lo mir� sin decir nada. Me hab�a quedado completamente congelado.

- Feliz navidad Kurt- me dijo con una sonrisa.

Ah� estaba �l. Blaine, alej�ndose elegantemente de mi casa, subiendo a su elegante coche y abandonando la cuadra. Y ah� estaba yo. Como un bobo, parado frente a la puerta mirando fijamente sin mirar nada en particular. Perdido y absorto en mi confusi�n. Sent� la fiebre volver nuevamente. �Seria realmente la fiebre? No lo sab�a. Ante la duda, entr� nuevamente a casa. Mi cuerpo temblaba, pero en verdad, me sent�a muy acalorado. Todo aquello hab�a sido demasiado peligroso. Demasiado arriesgado. Me recost� sobre el sill�n y me sumerg� en mis pensamientos. Luego de un rato y, por lo que puedo entender, me qued� sin m�s, profundamente dormido.

As� fue como todo comenz�, en un d�a de navidad. En ese momento, realmente no sab�a que me deparar�a el futuro. Ignoraba totalmente, que mi mundo estaba a punto de transformarse completamente.